"No funcionan", dijo a Cooperativa Julio Hurtado, celebrando que se haya detenido una construcción "monstruosa".
Lo anterior se refleja "también el Costanera Center y las universidades en Bellavista", aseguró.
El arquitecto y urbanista Julio Hurtado opinó este martes en Una Nueva Mañana que fue el mal funcionamiento de las autoridades reguladoras chilenas lo que permitió que la construcción del "monstruoso" mall de Castro fuera aprobada y continuara pese al evidente de la normativa vigente en la materia.
"Ellos a sabiendas de que estaban haciendo una cosa ilegal la llevaron adelante, pero eso pasa con todo, pasa con el Costanera Center, con las universidades en Bellavista. Lo importante de este asunto es que las instituciones no funcionan", opinó el profesional al comentar la decisión de la empresa Pasmar de paralizar finalmente las obras.
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| Pasmar actuó ilegalmente "a sabiendas", dijo el experto. (Foto: UPI) |
"Las verdaderas razones son políticas. Yo no quiero pensar mal, pero sí hay una elección (municipal) este año", apuntó Hurtado, indicando que "antes de aprobarse este proyecto hubo un sospechoso cambio en el plan regulador, que permitía hacer esta cosa", y aún con ello cuando se iniciaron las obras no hubo "correspondencia entre lo que se presentó y se construyó", y de todas maneras se llevó adelante.
Este caso demuestra que "las autoridades tienen las manos atadas, ya sea por presiones políticas, financieras, y además hay una manipulación de la opinión pública, porque la gente e incluso los arquitectos que viven allá también quieren un mall, pero no ese monstruo, que rompe la ciudad".
"Nadie que está criticando esta monstruosidad está en contra de que exista un mall en Castro, sino que se está diciendo dónde y cómo, y ahí es donde hay una manipulación, porque las autoridades dicen que todo el mundo quiere el mall, y sí; todo el mundo quiere el mall, pero no tiene por qué ser ahí y estableciendo además una especie de pillería: si tú me dices 'voy a hacer tal cosa' y yo te la apruebo, y luego tú haces una totalmente distinta y luego yo, como autoridad, no aplico todos los instrumentos posibles para parar esta cosa, hay algo raro ahí".
"Hay una falla de base, porque la empresa hace aprobar a la Dirección de Obras un determinado proyecto, que ya era malo por la localización, la cantidad de pisos a dos cuadras de la catedral, patrimonio de la Humanidad, y sin embargo, se hizo algo distinto a sabiendas", reiteró el experto.
