El titular de Economía respondió a las críticas por parte de la Conferencia Episcopal.
Aseguró que se continuarán buscando acuerdos a través del diálogo.
"Necesitamos restablecer la conectividad y lo estamos haciendo a través del diálogo", sostuvo la autoridad.
El ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, descartó en Cooperativa que exista "centralismo" en la búsqueda de soluciones al conflicto en Chiloé tras las críticas provenientes de la Iglesia.
En diálogo con Lo que Queda del Día, Céspedes sostuvo que "hemos estado en negociaciones con distintos actores, lo que nosotros hemos hecho es demostrar nuestra voluntad de diálogo con todos, estamos abiertos a discutir con todos los dirigentes".
"Estamos dispuestos a levantar mesas de trabajo en relación a todos los otros temas que han surgido y eso lo hemos mantenido en cada una de las conversaciones que hemos sostenido", recalcó.
Al ser consultado sobre porqué no se ha usado la fuerza pública para evitar los bloqueos de caminos, Céspedes indicó que "el mandato que se nos ha entregado es dialogar, buscar puntos de acuerdo de forma tal que podamos llegar a una buena situación o a un momento en el cual podamos levantar esos bloqueos sobre la base de este diálogo que estamos entablando".
"Necesitamos restablecer la conectividad y lo estamos haciendo a través del diálogo", destacó.
En relación a las críticas de la Conferencia Episcopal por el centralismo del Ejecutivo, Céspedes planteó que "hemos tratado de discutir con los actores regionales esta visión respecto de lo que son los desafíos de la regionalización. Nosotros como Gobierno hemos sido, de alguna u otra forma, claros representantes de una visión descentralizadora del país, así lo reflejan las políticas que hemos implementado".
"Nosotros siempre hemos estado dispuestos a dialogar con todos y cada uno de los pescadores en cada uno de los formatos en que ellos hayan considerado pertienentes en sus intereses, no hemos nunca rejuzgado o condicionado de ningún tipo de formato, así que si algo hemos mostrado es vocación de diálogo", añadió, descartando que se busque quebrar el movimiento.
