El diputado Fidel Espinoza (PS) explicó en conversación con Lo Que Queda del Día en Cooperativa la denuncia contra la firma neozelandesa Manuka, que opera en la Hacienda Rupanco, Puerto Octay, y que obligó a sus trabajadores a matar a miles de terneros en cada temporada.
Esto con el fin de que las crías no consuman la leche que produce la empresa: "No estamos hablando de eutanasia, estamos hablando de una matanza de animales porque los dejan morir de hambre en los establos".
Acusó al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de ineficiencia, luego que el organismo declarara -mediante un comunicado- que no se detectó maltrato animal, explicando se fiscalizó, detectaron algunas irregularidades, se inició un proceso sancionatorio y que se multó a la empresa con 25 UTM.
Ante esto, Espinoza manifestó que "en Chile se denominaría esa declaración del SAG como 'tratar de embolinar la perdiz' (...) No dicen en ninguna parte las denuncias que como diputado fiscalizador cumplí en la Cámara, ellos tienen pleno conocimiento de las denuncias que yo hice, porque ellos saben que no hice nada".
"Desconozco el por qué, yo creo que es falta de eficiencia. Sí hay ineficiencia", criticó.
El diputado PS reconoció que "lo que me duele más es que haya una autoridad regional, como el director del SAG (Alfredo Fröhlich), que justifique estos hechos para tratar de salvar la responsabilidad que su propia entidad tiene en estos casos, al no haber realizado lo que tuvo que haber realizado".
Terneros son enterrados "vivos"
Sobre las irregularidades que ocurren en la hacienda, el diputado añadió que "en muchos casos les aplican martillazos en la cabeza para que dejen de existir y después botarlos a zanjas que ellos mismos abren con sus maquinarias al interior de los terrenos de la propia Hacienda Rupanco y después los sepultan. Muchos trabajadores me dijeron que varios de estos terneros llegan vivos a las zanjas y simplemente son enterrados", indicó.
Espinoza aseveró que si la empresa neozelandesa "hiciera esto en su país, los gerentes todos estarían presos".
Incluso señaló que "la empresa Manuka ya hace tres años fue denunciada por este mismo diputado producto de que siete trabajadores de la misma hacienda cayeron enfermos al hospital base por enfermedades muy extrañas".
Versión de SAGO
Mientras que la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (SAGO A.G.), a través de un comunicado, informó que "el proceso de eutanasia, es un proceso que está avalado por la normativa nacional e internacional, en el bien entendido que ésta se aplique respetando el bienestar animal y en circunstancias bien específicas".
Eso sí, SAGO "no comparte esta práctica de Manuka, tomando en cuenta que existen diversas formas de otorgar un mejor destino a los animales, por ejemplo entregándoselos productores de la zona, lográndose con ello mejorar la calidad de vida de estos y a su vez evitar el enorme daño a la imagen del sector lechero nacional".