Alejandro Buschmann, integrante del equipo de científicos designados por el Gobierno que se embarcó en un buque de la Armada para estudiar la marea roja en el sur, explicó en Una Nueva Mañana de Cooperativa que el fenómeno ha ido disminuyendo, pero la toxina en los mariscos tarda más tiempo en limpiarse.
"No hay que confundir. Todo el sistema de monitoreo de marea roja que tiene el Instituto de Fomento Pesquero y otra institucionalidad sigue funcionando, y son ellos los que llevan a cabo y controlan cómo se ha ido desarrollando la marea roja", indicó.
Sostuvo que "esta comisión está apuntando a resolver los cuestionamientos de por qué se debió esta marea roja, entonces no estamos a cargo del monitoreo de la marea roja ni de las funciones, eso sigue estando de los organismos competentes y son los que han dado indicaciones de que las semanas pasadas la marea roja, la cantidad de células en el agua, ha venido disminuyendo".
Aclaró que ello "no indica que los mariscos sigan teniendo niveles de toxina altos, porque eso demora bastante más en limpiarse de la concentración de toxinas que tienen en sus tejidos".
Buschmann dio cuenta que "tomamos muestras de la calidad del agua, de los fondos de mar, muestras de plancton, todas estas muestras acaban de ser desembarcadas del Cabo de Hornos, hay algunas muestras que van a ser desembarcadas en Talcahuano que van a la Universidad de Concepción".
"Estas muestras acaban de llegar esta mañana al laboratorio y empezamos a trabajar en ellas", agregó.
"Hemos estado midiendo las condiciones ambientales y uno de los elementos que estamos midiendo es nitrógeno en el medio para determinar si éste se ha mantenido en concentraciones normales o ha estado más alto, y segundo, tratar de identificar por algunas técnicas biogeoquímicas determinar si ese nitrógeno, ese amonio, viene de formas que podríamos asociar al vertimiento de salmones"
Espera tener en "unas cuantas semanas" el resultado de los estudios.
