Jessica Barrientos reconoció su responsabilidad en el fraude, que cometía coludida con un funcionario de la Armada.
En el Juzgado de Garantía de Punta Arenas, la mujer reconoció su responsabilidad en los hechos.
En el Tribunal de Garantía de Punta Arenas se llevó a cabo un juicio abreviado en contra de Jessica Barrientos Vidal, acusada de vender matrículas fraudulentas a buzos mariscadores.
Según los antecedentes, los hechos ocurrieron entre abril de 2013 y mayo de 2015, donde la propietaria de la embarcación Lesly I ofreció a 18 pescadores de la capital de la Región de Magallanes y de la comuna de Calbuco obtener el permiso a cambio de dinero, sin cumplir con los trámites correspondientes.
Barrientos Vidal actuaba coludida con un funcionario de la Armada, Carlos Cabello Bosne, que era el encargado del otorgar los documentos.
La mujer reconoció su responsabilidad y fue condenada por los delitos de uso y falsificación de instrumento público y soborno, por los cuales podría ser condenada a una pena de ocho años.
Tras el procedimiento abreviado, no obstante, arriesga cinco años de presidio, pues se le reconocieron las atenuantes de irreprochable conducta anterior y colaboración sustancial para el esclarecimiento de los hechos.
En cuanto a Cabello Bosne, se encuentra procesado, aunque en libertad, luego de pasar algunos meses recluido en el Destacamento Cochrane, hasta que la Corte Marcial -con sede en Valparaíso- aprobó su excarcelación.
