La Corte de Apelaciones de Chillán revocó la prisión preventiva que hace más de un año regía sobre el imputado Marcelo Campos por los delitos de cohecho y violación de secreto en la arista chillaneja del caso Luces Led.
En fallo unánime, la primera sala del tribunal de alzada cambió la medida cautelar dictada por el Juzgado de Garantía de San Carlos, tras ser impugnada una nueva revisión por la defensa el imputado, y la cambió por arresto domiciliario total.
"Los hechos habrían ocurrido antes de noviembre de 2018, sin perjuicio de las diferencias que alega, y que no existe revelación de secreto, por cuanto si bien intervino en el proceso de licitación, lo fue en su calidad de abogado de la municipalidad de Chillán, todo lo cual modifica las penas que arriesga y por ende hace disminuir la necesidad de cautela", razonó el tribunal de alzada.
La resolución agrega que "teniendo presente que la prisión preventiva se ha extendido aproximadamente por un año, que el persecutor recientemente ha ampliado por 45 días más la investigación y que su mantención no resulta imprescindible para el éxito de la misma o la seguridad de la sociedad, cabe su sustitución por una menos intensa".
Reacciones de la defensa
El abogado Giovanni Gotelli, defensor del ex asesor jurídico de Chillán Marcelo Campos, señaló que la resolución del tribunal de alzada es justa, ya que "no es necesaria la prisión preventiva para cautelar el proceso ni puede ser una condena anticipada".
Agregó que esta resolución es importante ya que "preparar una defensa en un juicio, cuando se tiene al representado privado de libertad, siempre es un problema, mientras que al no estar privado de libertad se puede preparar un juicio de mejor manera".
Hechos investigados
La Fiscalía sostiene que a partir del año 2016 los imputados de la empresa Itelecom decidieron cómo ofrecer sobornos a funcionarios públicos con el objeto de asegurar la adjudicación de licitaciones públicas vinculadas a la instalación de luminarias led en distintas comunas del país.
En dicho contexto, el dueño de la empresa, Marcelo Lefort, habría contactado durante el primer semestre de 2019 a Marcelo Campos, ofreciéndole dinero y por su intermedio, también al ex administrador municipal Ricardo Vallejos, con la intención de favorecer a la empresa en el proceso de licitación en Chillán.
