En prisión preventiva quedaron cuatro integrantes de una banda delictual dedicada a robos con violencia a locales de juegos de azar de comerciantes chinos en diferentes ciudades del centro sur del país.
La investigación fue llevada por la Unidad de Análisis Criminal de la Fiscalía Regional de Ñuble a partir de hechos delictuales cometidos en Chillán, San Carlos, Linares, Osorno y San Bernardo desde mayo de 2018, consiguiendo sumar casi 27 millones de pesos.
"Ellos se aprovechaban de las limitaciones idiomáticas de las víctimas, porque aparentemente son reacias a participar en el sistema de persecución penal y hubo que tomar medidas excepcionales para que concurrieran a declarar y a hacer las diligencias que la Fiscalía requería", comentó el jefe de la Fiscalía de Análisis Criminal, Álvaro Hermosilla.
Además, "había situaciones culturales que hacía de los comerciantes chinos un grupo objetivo especialmente atractivo para convertirse en víctimas de la actividad delictual, ya que manejaban mucho dinero en efectivo y no concurrían al sistema bancario formal".
El fiscal Álvaro Hermosilla destacó también la violencia con que actuaban: "Hay imágenes que dan cuenta que ellos reducían a los dependientes de estos locales, los amarraban a sillas, encerraban en el baño, les ponían pistolas en la cara, de manera que eran bien decididos a la hora de cometer los ilícitos y actuaban con harta crueldad", apuntó.
Operación Montecarlo
El jefe de la Brigada Investigadora de Robos de Chillán, subprefecto Miguel Durán, comentó que "la detención se realizó a través de diligencias simultáneas en las comunas de Los Ángeles, San Fernando y Quilicura, e implicó un amplio despliegue de más de 60 detectives, pudiendo incautar armas empleadas, dos placas de carabineros, dinero en efectivo y vestimentas asociadas al delito".
Los sujetos fueron identificados como Juan Pablo Díaz, Luis Lorca, Matías Allende y Moisés Contreras, y fueron puestos este jueves a disposición del Tribunal de Garantía de Chillán, donde fueron formalizados por robos con violencia y robos con intimidación en cinco hechos investigados.
Además, uno de ellos fue formalizado por tráfico de drogas, debido a que fue encontrado en su poder medio kilo de marihuana.
Todos quedaron con prisión preventiva por el plazo de tres meses para la investigación de los hechos, y además se ordenó la persecución de un quinto individuo que se mantendría fugado de la policía.