Carlos Concha fue detenido el 21 de octubre, durante el inicio del estallido social.
Fiscalía argumentó que la mochila en la que portaba los artefactos incendiarios contenía restos de bencina.
El joven y su familia niegan su participación en el delito por el cual fue acusado.
Con arresto domiciliario nocturno, prohibición de salir del país y prohibición de participar en marchas quedó Carlos Concha Vergara, de 18 años, quien el 21 de octubre del año pasado fue detenido por el delito de porte de bombas incendiarias, en el marco de las manifestaciones durante el inicio del estallido social en Chillán.
La medida precautoria fue resuelta en segunda instancia por la Corte de Apelaciones de Chillán, tras la apelación del Ministerio Público a la medida de firma mensual resuelta primeramente por el Juzgado de Garantía.
El abogado Francisco Soto, jefe de la Unidad de Asesoría Jurídica de la Fiscalía Regional de Ñuble, señaló que "la mochila en la que había portado las bombas incendiarias contenía restos de bencina, por lo tanto, ese es un dato importante para efectos de establecer la participación de esta persona, respecto de esos elementos, y corrobora lo que había sido señalado por los testigos, particularmente los funcionarios policiales que participaron en su detención".
Sin embargo, dicha tesis ha sido negada por el joven y su familia, quienes han señalado en las instancias judiciales previas que nunca hubo porte de este tipo de elementos y que cuentan con pruebas gráficas de ese día.
