Los predios deben tener entre 15 y 40 hectáreas.
Adelantan que debería estar ubicada entre San Carlos, Quirihue y Chillán.
El nuevo recinto penal debe tener la capacidad de albergar mil reclusos.
El intendente del Ñuble, Martín Arrau, confirmó que el próximo lunes se publicará un llamado a dueños de predios para iniciar la búsqueda de terrenos para el traslado de la Cárcel de Chillán desde el centro urbano hacia un sitio rural.
Esta decisión busca permitir la construcción de un penal de alto estándar y ha sido un proyecto que ha debido esperar la sucesión de varios gobiernos.
Las propuestas serán recibidas dentro de un plazo de 30 días en el tercer piso del Gobierno Regional de Ñuble y el objetivo es determinar la ubicación de un terreno para la futura cárcel regional durante el 2019 e iniciar el proceso de licitación para su construcción durante el 2020 mientras el diseño está siendo trabajado por la Secretaría Regional Ministerial de Justicia.
El intendente Arrau señaló que "el Ministerio de Desarrollo Social pide que los precios tengan tasaciones oficiales, revisadas por bancos o instituciones ajenas. Nuestra idea es determinar lo antes posible dónde va a quedar la futura cárcel regional, pero queremos ser muy responsables en el uso de los recursos, por eso abrimos esto al mercado, para recibir muchas ofertas, pero no por eso a cualquier precio".
La seremi de Justicia, Jacqueline Guíñez, señaló que "la idea es que el terreno sea entre a 15 a 40 hectáreas, en terrenos regulares, planos, que podamos tener el cambio de uso de suelo, que no tenga impedimento con el Plan Regulador, por tanto estaría en una zona rural, no más allá de 15 kilómetros de distancia de los centros de justicia, y libres de riesgos de desastres naturales".
El director regional de Gendarmería, comandante Gonzalo Hermosilla, manifestó que un nuevo recinto penitenciario de alto estándar "permitirá solucionar estructuras de segmentación entre imputados y condenados; también está asociada a la intervención por parte del equipo de reinserción en el nuevo modelo de cárcel, que va a estar ubicada georeferencialmente y equidistantemente entre San Carlos, Quirihue y Chillán, con la idea de absorber estas tres unidades penales".
Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), Cristian Montecinos, señaló que "este anuncio es lo más serio que he escuchado al respecto, y esperamos que cumplan con este proceso, necesitamos una cárcel que tenga los espacios adecuados para propender a la reinserción".
