Las actividades comienzan con una ofrenda floral a las víctimas en el cementerio.
Desde las 20:00 horas, las actividades se concentran en la Plaza de Armas.
Chillán quedó en ruinas y más de 24 mil personas perdieron la vida bajo los escombros.
Han pasado 80 años desde el terremoto que azotó Chillán el 24 de enero de 1939.
El remezón se sintió a las 23:32 horas, y bastaron tres minutos para dejar la ciudad en ruinas y más de 24 mil víctimas fatales sólo en ésta ciudad.
Si bien la historia lo ha hecho conocido como el terremoto de Chillán, su epicentro fue cerca de Quirihue, comuna que también desapareció bajo los escombros de sus propias casas.
Los actos conmemorativos hoy están conectados bajo el slogan "La Memoria salva vidas", a partir de una agenda que involucra actividades de distintas instituciones en la capital de la región de Ñuble.
Agenda conmemorativa
Como ya es una tradición, a las 09:00 horas se hará entrega de una ofrenda floral en el Cementerio Municipal, a los pies del monumento a los caídos en la zona de la fosa común.
Entre las 10:00 y las 13:00 horas, en la explanada de la Intendencia Regional de Ñuble, se instalará el Simulador Sísmico Móvil de la Onemi, vehículo que permite recrear el movimiento de siete sismos históricos recientes.
A las 11:00 horas, se instalará una placa conmemorativa en la Escuela México de Chillán, cuya construcción post terremoto fue gracias a los aportes del Gobierno Mexicano.
Por la tarde, desde las 20:00 horas, el punto de encuentro será la Plaza de Armas de Chillán, donde se iniciará un recorrido en bicicleta por puntos claves que recuerdan el terremoto en la ciudad, para luego sumar intervenciones sonoras y lumínicas que invitarán a los asistentes a experimentar las sensaciones vividas durante el terremoto: toque de difuntos, telurismo, estallido lumínico, vals "Bajo los escombros de Chillán".
Finalmente, las actividades concluirán con una Alerta de Memoria, a las 23:32 horas, minuto exacto del terremoto, con la activación de las sirenas de bomberos de todos los cuarteles de Chillán, así como campanazos de las iglesias de la ciudad.
