La Corte de Apelaciones de Chillán confirmó la orden de arresto domiciliario total contra un conductor que bajo estado de ebriedad protagonizó un accidente fatal donde falleció su copiloto, en septiembre de 2017, en la Ruta 59 conducente a Yungay.
En fallo unánime, la primera sala del tribunal de alzada ratificó lo resuelto por el Juzgado de Letras y Garantía de Bulnes el 16 de febrero pasado, denegando así el recurso presentado por la defensa del imputado Felipe Urra.
De acuerdo a los antecedentes presentados por el Ministerio Público, el hecho se produjo en la madrugada del 15 de septiembre de 2017, cuando el imputado conducía ebrio, perdiendo el control de su vehículo, volcando a la altura del kilómetro 32 de la ruta.
Tras el accidente, el imputado y su copiloto Germán Matamala fueron trasladados hasta el Hospital de El Carmen y luego al Hospital Herminda Martin de Chillán, recinto asistencial donde finalmente su acompañante perdió la vida debido a un TEC grave con fractura de cráneo.
El documento explica que "existe una pericia que haciendo un detallado análisis, ha concluido claramente que el imputado era quien conducía el vehículo al tiempo del accidente, en estado de ebriedad, provocando la muerte de la víctima, lo que se ha corroborado por los dichos de los funcionarios que los atendieron".
El tribunal dispuso la cautela en atención a la penalidad asignada, y en caso de condena, "sería cumplimiento efectivo por un año" consignó el fallo.