La Corporación Nacional Forestal sumó un helicóptero Kamov a sus recursos aéreos para combatir incendios forestales durante la temporada 2021–2022 en la Región de Ñuble.
La aeronave ya está operativa y se asentará en el Aeródromo Bernardo O'Higgins de Chillán. Alcanza una velocidad máxima de 260 kilómetros por hora y tiene una capacidad de levantamiento máximo de cinco toneladas, características que lo convierten en el helicóptero de doble motor más potente para cargas en medio de emergencias forestales.
"Este helicóptero tiene una capacidad de cinco mil litros de agua y de transportar nueve brigadas, con lo cual la región dispone, desde ahora, con cuatro aeronaves, un avión AT con capacidad de 1.300 litros de agua y un tiempo de arribo a los lugares más alejados de la región de 15 minutos", destacó Domingo González, director regional de Conaf en Ñuble.
Otro de los helicópteros disponibles es un Bell 412 que transporta hasta 1.300 litros de agua y el último es uno pequeño, del tipo B3, que transporta hasta 900 litros por descarga.
Las brigadas terrestres serán 15 para esta temporada, lo que se traduce en 177 brigadistas. Una de las brigadas es mecanizada, con un Skidder, "maquinaria que permite realizar cortafuegos en muy poco tiempo al momento de presentarse una emergencia", indicó González.