El intendente del Ñuble, Martín Arrau (Ind. UDI), llamó al oficialismo local a mantener la unidad luego de que enfrentaran la semana más tensa desde que se creó la región.
El detonante fue la implementación del nuevo sistema de distribución de agua en zonas rurales, tras informarse desde la propia Intendencia sobre el conflicto de interés de la empresa Sotrafer SpA, cuyo dueño es sobrino del administrador Municipal de Chillán y la Gobernadora de Diguillín, Paola Becker (ambos militantes de RN).
La situación se tradujo en una abierta crítica de personeros regionales de Renovación Nacional, llegando incluso a condicionar la participación del partido en el Comité Político Regional. Tal como lo indicó el presidente de Renovación Nacional, Rodrigo González, quien a la vez es jefe de gabinete de la gobernadora de Diguillín.
Es así como la reunión no se concretó ni el viernes pasado, fecha que correspondía por agenda, ni este lunes, luego de que primero surgiera una convocatoria emitida desde el correo del jefe de gabinete de Martín Arrau.
Intendente pone paños frío
El intendente Martín Arrau en entrevista con Cooperativa, señaló que si bien las presiones son parte del mundo político, no estamos frente a una crisis del conglomerado en la región. No obstante, hizo un llamado a regresar a un trabajo en unidad.
"Que estas cosas pequeñas que enrarecen los ambientes queden atrás. Lo que necesita Ñuble para crecer es que trabajemos todos juntos, con trasparencia, dando toda la información a la comunidad, porque tienen derecho a estar informados", indicó.
Asimismo, agregó que "esta es la única manera de avanzar, porque cuando hay ambientes complicados no se avanza y perdemos tiempo en cosas que no producen nada para nuestros habitantes".
Mientras tanto, sigue en espera la concreción de la primera reunión del Comité Político Regional durante el presente año, a la cual los representantes de Renovación Nacional están dispuestos a asistir, pero para expresar sus molestias por las situaciones anteriormente señaladas.