En rigor se trata de 1.138 trabajadores pertenecientes a la atención primaria, hospitales comunitarios y de alta complejidad de la región.
Los funcionarios inoculados coinciden en que la dosis de refuerzo sirve para protegerse de un virus que va mutando.
En el Hospital de Chillán se inició la administración de la cuarta dosis de la vacuna contra el Covid-19 en Ñuble, partiendo con 1.138 funcionarios de la salud pertenecientes a la atención primaria, hospitales comunitarios y de alta complejidad.
Christian Maldonado, seremi (s) de Salud de Ñuble, señaló que "estamos viviendo un aumento de casos histórico, con el ingreso de la variante Ómicron al país, que, si bien las características clínicas son diferentes, tiene un potencial que algunas personas se puedan agravar, por eso es tan importante completar el esquema de vacunación".
"Como Servicio de Salud estamos muy contentos de poder iniciar esta inoculación, dado que sabemos que las vacunas nos protegen y nos dan más seguridad para trabajar", indicó el subdirector de Gestión Asistencial, Dr. Max Besser.
Francisca Pulgar, TENS del Hospital Herminda Martín, fue una de las primeras funcionarias del recinto en recibir esta segunda dosis de refuerzo, agradeciendo la posibilidad de acceder a ella en forma prioritaria.
"Personalmente es muy importante tener esta dosis de refuerzo ya que uno al estar trabajando en un servicio de salud de por si está más expuesta que la población en general y así uno se protege, protejo a mi entorno, a mis colegas y a los pacientes que atendemos día a día, señaló.
Asimismo, enfatizo en que "todos sabemos que los virus van mutando y la dosis de refuerzo nos sirve para enfrentarlo, a la población yo le diría que se vacune porque es importante para nuestro cuidado y el de quienes están a nuestro alrededor".
