Los regantes del Río Ñuble abrieron la discusión sobre la necesidad de decretar estado de emergencia agrícola para la región, debido al déficit de precipitaciones y la baja del nivel de agua de la principal cuenca del territorio.
De acuerdo a la Dirección General de Aguas, los volúmenes de agua del Río Ñuble presentan un déficit de 46 por ciento en comparación con un año normal, alcanzando a la fecha tan sólo 762 millones de metros cúbicos.
La Dirección Meteorológica de Chile confirma un déficit de precipitaciones acumuladas en torno a un 34 por ciento, proyectándose una difícil temporada de riego, con restricciones para la producción y el desarrollo de la actividad agrícola.
"Tendencia de Santiago al sur"
Salvador Salgado, gerente de la Junta de Vigilancia del Río Ñuble, señaló que "serán las autoridades del área quienes evalúen la necesidad de declarar emergencia agrícola en la zona, pero claramente hay una tendencia que ha aumentado progresivamente desde Santiago hacia el sur".
Salgado agregó que "la grave escasez hídrica con la que convivimos todos los años sería resuelta con las tres grandes obras de riego que espera la Región de Ñuble. Por el momento será la autoridad la encargada de hacer seguimiento a este fenómeno y tomar las providencias que correspondan para una buena temporada de cosecha".
El ministro de Agricultura, Antonio Walker, en su reciente visita a la zona, indicó que "Ñuble ha tenido precipitaciones que están por debajo de un año normal, pero, a diferencia de otras zonas, cuenta con mayores reservas de nieve".
Por ende, la sequía no está en los niveles de Coquimbo, Valparaíso, la Región Metropolitana y O'Higgins, donde ya se decretó emergencia agrícola.
Según Walker, la zona central del país enfrenta una de las sequías más importantes de los últimos 60 años y cifró en 70 por ciento el déficit de lluvias.
