El Juzgado de Garantía de Chillán comunicó la sentencia para el profesor de taekwondo identificado con las iniciales D.G.L., quien fue condenado por el delito de trato degradante hacia tres alumnos que asistieron a su escuela de artes marciales entre los años 2017 y 2019.
"Tonta", "pavo", "llorones", "débiles" eran palabras que usaba el sujeto para dirigirse a dos niñas y un niño, incluso frente a otros alumnos y apoderados, lo que la Justicia consideró maltrato psicológico hacia las víctimas.
El tribunal determinó tres penas de cárcel en su contra, que suman un total 540 días, junto con la inhabilidad por nueve años para ejercer su oficio cuando tenga relación directa con menores de edad. Además, deberá asistir por 60 días a un programa de rehabilitación para maltratadores, y tendrá prohibición de acercarse a las víctimas.
"SEÑAL IMPORTANTE"
Este caso desmitifica la idea de que los deportes de contacto o de alta competencia admitan un trato violento, degradante o vulneración hacia quienes lo practican, más aún en el caso de menores de edad.
La sentencia fue valorada por el fiscal Florentino Bobadilla, principalmente por tratarse de un delito nuevo (trato degradante), respecto al que hay muy poca jurisprudencia: "Esta ley se creó el 2017 y (el caso en cuestión) es sumamente importante; esta sentencia manda una señal sumamente clara respecto a que a los niños no se les debe tratar de manera degradante, porque son tratos que atentan contra su dignidad".
Entre las reacciones sobre el caso, la coordinadora regional subrogante de Seguridad Pública, Margarita Garrido, valoró el precedente que marca esta sentencia en el trato hacia los menores de edad, especialmente en el contexto educativo, donde no puede haber espacios a ningún tipo de violencia.
"Para nosotros es importante que se marque un precedente, porque una de las aristas que tenemos es la prevención de la violencia, y para eso estamos constantemente trabajando en campañas y sociabilizando información, para que todos mejoremos el trato hacia las personas", manifestó Garrido.