Las fiscalizaciones se extendieron en toda la costa de Coelemu, Trehuaco y Cobquecura.
Además, seis pescadores fueron detectados cuando se encontraban en zona de playa.
En su balance, autoridades destacaron el comportamiento de vecinos de zonas costeras de Ñuble.
En el borde costero de Ñuble se vivió sin mayores incidencias la alerta preventiva por tsunami menor, emanada desde el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (Shoa) y Onemi, tras el terremoto que el jueves afectó a Nueva Zelanda.
Desde la tarde de ayer, autoridades regionales y comunales de Cobquecura, Trehuaco y Coelemu participaron de un Comité Operativo de Emergencia, activándose un plan preventivo de fiscalizaciones que se mantuvo durante toda la noche para mantener informada a la comunidad y asegurar que se alejaran a más de 80 metros desde la zona de playa.
La gobernadora de Itata, Mariela Fernández, señaló que "tuvimos 12 personas albergadas en Coelemu, de ellos, dos menores de edad, que llegaron al albergue de la escuela de Vegas de Itata, tras estar acampando en una zona de playa, permitiéndoseles regresar una vez que se levantó la alerta".
Además, agregó que "seis pescadores fueron detectados en el sector de Boca Itata, siendo invitados a retirarse de la orilla de la costa".
La alerta fue levantada a eso de las nueve de la mañana, tras el paso del tren de olas con oscilaciones que fluctuaron entre 10 a 20 centímetros sobre el nivel del mar.
