Ulises Labrín, de 23 años, y una menor de edad, se encuentran acusados por el delito de homicidio calificado, hecho ocurrido en julio de 2019.
Durante la presente jornada, se desarrollaron los alegatos de apertura en la causa.
Este martes se inició ante el Tribunal Oral en lo Penal de Rancagua el juicio oral en contra de Ulises Labrín y una menor de edad, acusados por el homicidio calificado del joven scout Tomás Acevedo Olea, hecho ocurrido el 27 de julio de 2019 y donde la víctima fue atacada en más de 200 ocasiones con un arma blanca.
De acuerdo a la acusación del Ministerio Público, la acusada, aprovechando su cercanía con Tomás, concertó una reunión en el Estero Zamorano, instancia en que el joven fue atacado por Labrín con un arma blanca.
El fiscal jefe de San Vicente, Claudio Riobó, detalló que "a raíz de distintas pruebas, se va a poder acreditar la responsabilidad penal que les corresponde a cada uno de los acusados y autores, tanto material como intelectual, en la comisión de un delito de homicidio calificado bajo las premisas de alevosía, de ensañamiento y de premeditación".
"Las circunstancias agravantes de haberlo cometido en un lugar despoblado, como es el lugar donde ocurre el hecho, y también con el uso de arma", agregó.
Durante este martes se realizaron los alegatos de apertura, en los cuales expusieron los distintos intervinientes, tanto la Fiscalía, como la parte querellante que representa a la familia de Tomás Acevedo
El Ministerio Público solicita la pena de presidio perpetuo para Ulises Labrín, mientras que para la menor, cinco años de internación provisoria con programa de reinserción social.
También intervinieron los abogados Felipe Santander y Hugo Carrera, defensores de Labrín y la adolescente, respectivamente.
Carrera negó que hubiera alguna "relación sentimental" entre el joven scout y su representada, planteando así que "exista móvil" para que ella presuntamente participara en el crimen.
Se espera que el juicio se extienda por cerca de ocho días, a lo largo de los cuales se presentarán cerca de 38 testigos, además de prueba documental y policial.
Por su parte, el padre de la menor acusada soslayó que "ella es inocente de toda culpa, ella desgraciadamente estuvo en un lugar donde no debía haber estado, pero ni siquiera ella presenció nada", reiterando lo que afirmó la jornada anterior en una entrevista, de que su hija "será la primera mujer en Chile violada y condenada".
"Esas entreviatas siempre sorprenden, pero es esperada. Estamos angustiados, expectantes, con pena, todo, sentimientos encontrados. Pedimos justicia, nada más que justicia para Tomás", expresó a su vez Patricia Olea, tía de la víctima.
