El Municipio de Rancagua ha cumplido con el 50% de este plan.
Se busca reforestar cerca de 2.000 ejemplares, principalmente de Peumo y Quillay.
Uno de los sectores reforestados es la remodelada plaza de Villa Alborada.
Más de mil árboles nativos ha plantado la Municipalidad de Rancagua en diversos sectores de la ciudad, como parte del programa de reforestación que busca mejorar la calidad de vida de los vecinos.
De acuerdo al municipio, el objetivo es reforestar con cerca de 2.000 ejemplares de especies nativas, especialmente de Peumo y Quillay.
Uno de los sectores reforestados corresponde a la remodelada plaza de la Villa Alborada, donde se habilitó una zona de parque con árboles, áreas verdes y arbustos.
El director de Secplac, Raimundo Agliati, destacó que era "un espacio perdido, que estaba cerrado, y que logramos recuperar y construir esta área verde. Recuperamos árboles nativos, nueva iluminación y también la ciclovía que conecta la Carretera El Cobre con Miguel Ramírez, hace poco costruimos una multicancha que complementa este espacio público".
