El alcalde de Colchane, Javier García, acusó este viernes que la agrupación internacional Tren de Aragua ha tomado el control migratorio irregular hacia Chile en la frontera con Bolivia, advirtiendo que operan "no sólo para ingresar migrantes, sino que también para ingresar drogas".
A este peligroso cartel criminal, que ya cuenta con detenciones de sujetos vinculados a una de sus facciones en el país, se le atribuye una serie de brutales delitos, entre ellos: tráfico ilícito de migrantes, secuestros, extorsiones, ejecuciones, torturas, mutilaciones genitales y de ojos.
En entrevista con el medio Ex-Ante, García reveló que "están operando organizaciones en el pueblo de Pisiga Bolívar, que es el pueblo boliviano más cercano (...), a 2 kilómetros de Colchane. Han ocurrido hechos de violencia, ataques, asaltos y, según la información que tenemos de parte de pobladores y dirigentes de esa localidad, estarían operando grupos organizados desde esa localidad para cruzar a las personas hacia Chile".
En esta línea, indicó que pese a que se registró una "disminución del flujo de personas que pasan por pasos no habilitados en la comuna" durante el último mes, los ingresos se hacen por sectores más alejados del complejo fronterizo y manejados -en su gran mayoría- por esta banda criminal: "es muy probable que estén operando no sólo para ingresar migrantes, sino que también para ingresar drogas hacia Chile", acusó el jefe comunal.
A esto sumó que el Tren de Aragua se caracteriza por ser violento en su actuar, afirmando que -según el mismo testimonio de migrantes que han sido sus víctimas- realizan "asaltos y extorsión", los que muchas veces no son denunciados por "temor" a lo peligroso de la organización.
"Son relatos de personas que han sido extorsionadas y algunos cuentan que les piden dinero a sus familias, les quitan la ropa y los dejan prácticamente con lo básico. También dicen que son principalmente venezolanos, que son de su misma nacionalidad. Esos son los relatos que he escuchado de migrantes que han llegado con claro daño psicológico producto de este tipo de actos", puntualizó García al medio antes citado.
Finalmente, indicó que solicitó una audiencia con la ministra del Interior, Izkia Siches, para abordar esta problemática y que se establezca "un canal de comunicación que permita de alguna manera coordinar la captura de este tipo de organizaciones".