El centro recreacional de eventos Jatata, al sur de Iquique, en la Región de Tarapacá, fue cerrado definitivamente tras una suspensión condicional del procedimiento por la muerte de Juan Troncoso, de 10 años, en agosto de 2018.
El cierre fue acordado por la Fiscalía de Iquique en el marco del proceso en contra de los gerentes, el supervisor y un encargado de la mantención de piscinas del recinto.
Las condiciones del acuerdo fueron, además del cierre, la prohibición de explotación por parte de los imputados y el término de la razón social Jatata, la donación de un equipamiento de seguridad y un botón de pánico a la piscina municipal de Iquique, el pago de una indemnización a los padres de la víctima, y la fijación de domicilio por parte de los imputados por el plazo de un año y medio.
El fiscal a cargo del caso, Francisco Almazán, dijo que "esta causa tenía dos posibles términos: llegar a juicio oral para buscar la sanción penal de los imputados u optar por una salida alternativa".
"Nosotros estábamos preparados para el juicio, teníamos las diligencias agotadas, sin embargo, en esta oportunidad y tratándose de un hecho de esta naturaleza, quisimos y optamos por acoger la solicitud expresa que nos hicieran ambos padres del menor fallecido de llegar a esta salida alternativa, ya que habían logrado un acuerdo con los imputados relativo al pago de una indemnización", precisó.
La suspensión del proceso fue aprobada por el Juzgado de Garantía de Iquique, luego de ser aceptada por los imputados y los padres del niño.