Esta especie, escasa en estado silvestre y oriunda de Perú y Chile, está siendo cultivada en cautiverio para mejorar su reproductividad.
La inversión de la iniciativa alcanza a 11.500 millones de pesos en un plazo de 12 años.
Actualmente se llevan a cabo tres subprogramas distintos.
Diversificar la acuicultura nacional, tanto en especies como en territorios, es el propósito que está detrás del Programa Corvina, impulsado por Corfo y ejecutado por diferentes entidades de estudio e investigación, como la Universidad Arturo Prat en la Región de Tarapacá, en donde una de las especies marinas más consumidas es la corvina y que ya pasa a una nueva etapa.
"La corvina, que actualmente es escasa en su estado silvestre, incluso con períodos de veda, ha tenido exitosos resultados en su reproducción en cautiverio a través de este programa, que está permitiendo generar una tecnología de producción de la especie para un futuro escalamiento del cultivo comercial", señaló Cristóbal Cobo Labarca, director del programa.
La inversión de la iniciativa alcanza a 11.500 millones de pesos en un plazo de 12 años, cuyo proceso comenzó en 2010 y se proyecta concluir en 2022. En este período se ejecutan tres subprogramas: Producción de juveniles en Tongoy, a cargo de Fundación Chile; engorde y pre-engorde en tierra, en Campus Huayquique de la Universidad Arturo Prat, y engorde en balsas jaulas en el mar.
