El derrumbe parcial de la fachada del Bar Ingés en Valparaíso este viernes, volvió a poner en la palestra el estado de la ciudad reconocida por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
Para el arquitecto y director del Centro de Estudios Patrimoniales de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Jorge Ferrada, la ciudad puerto "se está cayendo a pedazos".
Según el académico, la falta de una política de Estado, es la base de la situación que vive Valparaíso. "Valparaíso es una ciudad compleja, cara de mantener, de construir, de habitar y eso es consecuencia no solo de malas administraciones locales, sino que es algo que va mucho más allá cuando una ciudad se desarma de esta manera", precisó el experto.
"La ciudad lleva años en un continuo decaimiento, con una situación portuaria inestable, con una relación ciudad – puerto también muy relativa, en la cual siempre se han dejado a los actores regionales y locales generar los acuerdos. Pero esto no se trata de acuerdos locales, se trata de una medida de Estado y de plazos de una política de Estado. Es como pensar que una política portuaria se alimenta de decisiones a cuatro años, es un absurdo, los puertos funcionan con políticas a 25, 30, 40, 50 años", sostiene Ferrada.
En ese sentido, el académico acusó medidas parche. "Se cae una fachada y el Ministerio compromete fondos que no llegan... ¿qué es una fachada en todo el contexto de Valparaíso? Se necesitan políticas fuertes, apoyo a los propietarios para que puedan prepararlas, restaurarlas, rehabilitarlas. Son tres palabras que hacen que el patrimonio se sustente en el tiempo".
"La ley es el mínimo, esto amerita una visión país, de máximos no de mínimos. Es una ciudad muy importante para la historia de Chile y que se está cayendo a pedazos", aseguró el profesional.
Propuesta
Como vía a un mejor escenario, Ferrada propone "catastrar lo que hay porque es tal el desastre que ya no sabemos qué persiste, que podría ser reconocido patrimonialmente".
Sin embargo, agrega que "más allá de los edificios, está la gente, hay que ver cómo volver a poblar Valparaíso, cómo construir la fuente laboral. Eso es lo más importante porque si no habitantes, no hay edificios".
Como segundo punto "es crear estructuras económicas que soporten la mantención de bienes patrimoniales: liberación de impuestos o derecho a llave, que es una alternativa entretenida porque va de la mano con la planificación urbana".
"Sería una política muy bonita ir construyendo un centro cívico a cada uno de los cerros, eso hace ganar plata a un municipio para aportar a los bienes patrimoniales, se reactiva la economía barrial, hay trabajo porque se coordinan centros que hacen aparecer un dinamismo económico y social que no todas las ciudades tienen. Existiendo eso, existe habitabilidad y mantención que hace que una ciudad soporte".
Desde la Seremi de Vivienda no respondieron respecto de la entrega de fondos comprometida por Monckeberg en 2019.
Derrumbe
El derrumbe, según el encargado de Emergencias de la Municipalidad, Ezio Pasadore, se debió a "falta de mantención, vigas podridas, efecto de termitas y el inexorable paso del tiempo".
Además agregó que "esta propiedad no estaba en el catastro de demolición, el daño era interior, no había podido ser identificado. Sin embargo, tenemos un catastro de unas 15 propiedades que hay que intervenir con urgencia, que están principalmente en los cerros de Valparaíso".
De igual forma, el funcionario criticó que "lamentablemente los recursos comprometidos por el Ministerio de Vivienda con posterioridad al derrumbe de calle Huito nunca llegaron".
Miguel Villalobos, administrador del restaurant Wall Street y encargado del comedor emplazado en el Bar Inglés, relató a Cooperativa que "hace dos días que empezaron a caer unos ladrillos, como dos ladrillos, colocamos un cono, pero ayer fueron más los que cayeron. Se llamó al dueño del edificio, él revisó y quedamos de acuerdo de que iba a cerrar. Ese caballero nunca hace arreglos, llevamos 20 años ya y todos los arreglos que ha habido dentro los hemos hecho nosotros".