A partir de este 1 de abril comienza a regir el plan de descontaminación para las comunas de Quintero, Concón y Puchuncaví, que en el último tiempo se vieron afectadas por varios episodios de contaminación ambiental, afectando a toda la población, principalmente a los escolares.
La ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, llegó a la zona para explicar a los alcaldes de las mencionadas comunas -Óscar Sumonte (Concón), Eliana Olmos (Puchuncaví) y Mauricio Carrasco (Quintero)- los alcances del plan.
"Congelar inmediatamente todas las emisiones de la zona; establecer una reducción muy importante de material particulado, dióxido de azufre y óxido de nitrógeno que en tres años las empresas tendrán que realizar", dijo la secretaria de Estado.
La ministra añadió que "el control de todos los sistemas de monitoreo en la zona son de responsabilidad del Estado y en una auditoria que ahora en el mes de mayo el gobierno de Finlandia dará a conocer los resultados nos permitirá rediseñar toda la estructura de monitoreo".
Schmidt recalcó que "por primera vez se van a monitorear las emisiones de los gases hidrocarburos que generaron las emergencias", en referencia a los variados episodios de contaminación.
El plan afectará principalmente a las empresas Codelco Ventanas, AES Gener y a ENAP, responsables del 76 por ciento de las emisiones de material particulado, del 99 por ciento del dióxido de azufre (SO2) y también del 81 por ciento de emisiones de óxidos de nitrógeno.
El plan tiene una extensión de cinco años y tiene metas específicas relacionadas con los principales emisores de la zona.
En el caso de ENAP, se establecen emisiones máximas que permitirá que no se vuelvan a registrar nuevos episodios de contaminación en la zona.
También incluirá estudios de agua y suelo, algo que no se había medido, considerando que un instituto noruego planteó que no había mayor contaminación en el aire que la que hay en cualquier ciudad con un polo industrial.
Dirigentes de Quintero criticaron el plan
Pese al anuncio, dirigentes ciudadanos de las comunas afectadas criticaron esta iniciativa y la consideraron insuficiente.
"Muchos de estos caballeros podrían estar presos porque la gente sigue muriendo y no podemos estar contentos mientras la gente sigue muriendo por la descarga de metales pesados que la fundición no puede evitar a menos que se traslade", dijo Juan Valladares, dirigente de la Asamblea Puchuncaví.
En tanto, la vocera de "No más Zonas de Sacrificio", Javiera López, sostuvo que el proyecto "no considera al arsénico, no considera los metales pesados, no considera realmente la salud de la gente, no está en pos de la comunidad, está en pos de un lado empresarial, de un lavado de imagen que ellos tienen".
Otro vocero del mismo grupo, Cristóbal Sepúlveda, hizo hincapié en que "se está presentando este plan de descontaminación respecto de la contaminación ya existente y no de la contaminación que va a existir en un futuro con la ampliación del parque industrial, con la nueva construcción del muelle del terminal Oxiquim, que termina significando una situación de mayor desmedro a los derechos de las personas de Quintero y Puchuncaví".
La Superintendencia de Medioambiente contará con una delegación exclusiva y permanente en esta zona para poder fiscalizar la aplicación del plan que es pionero.