En un fallo dividido, el máximo tribunal confirmó la decisión de la Corte de Apelaciones a favor de la inmobiliaria ligada a Nicolás Ibáñez.
Para el urbanista Jeanette Bruna, la resolución marca un precedente que indica que las facultades técnicas corresponden a los directores de obras (DOM).
La Corte Suprema determinó que es ilegal el intento del alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, de detener el proyecto inmobiliario Parque Pümpin, perteneciente a la inmobiliaria Puerto Spa, ligada al empresario Nicolás Ibáñez.
El máximo tribunal confirmó un fallo de la Corte de Apelaciones de Valparaíso que acogió dos reclamos de ilegalidad presentados en contra de la Municipalidad de Valparaíso y del jefe comunal por la empresa.
Por tres votos a favor y dos en contra, la Tercera Sala de la Suprema determinó rechazar los recursos de casación interpuestos por Sharp y confirmó los fallos unánimes de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, que revocan los decretos del jefe comunal que dejaron sin efecto el permiso para edificar en el referido terreno, por estimarlos ilegales.
La sentencia confirma, además, la condena en costas al municipio porteño y el derecho a los perjuicios causados para la inmobiliaria.
"Lo fundamental del fallo es que marca un precedente que fija que las facultades técnicas pertenecen única y exclusivamente a los directores de Obras y no correspondía que el alcalde publicara dos años después un permiso en el Diario Oficial", comentó Jeanette Bruna, abogada urbanista, asesora de la Asociación de directores de obras y miembro del Consejo de Urbanismo y Construcción de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
