La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) inauguró oficialmente un nuevo depurador de emisiones en la Refinería Aconcagua, en la comuna de Concón, tras dos meses de marcha blanca.
Este depurador, denominado "Wet Gas Scrubber", permitirá disminuir en más de un 85 por ciento el material particulado y en cerca de un 48 por ciento el dióxido de azufre que se genera en el proceso de refinamiento del crudo, lo que tuvo una inversión aproximada de 70 millones de dólares.
Esta tecnología consiste en la captura por medio de rocío de agua las partículas contaminantes, cuyo efecto que produce es similar al de la lluvia sobre el smog de la ciudad ya que el agua evita que salgan las partículas, las que se acopian dentro del depurador para luego ser procesadas y gestionadas según la normativa ambiental.
"La puesta en marcha del depurador de emisiones ratifica el compromiso de la compañía de realizar las inversiones requeridas para proyectar el desarrollo de sus operaciones de manera sostenible en términos medioambientales, así como de garantizar un suministro energético acorde a los requerimientos del país", detalló la presidenta del directorio de ENAP, Gloria Maldonado.
Asimismo, el gerente general de ENAP, Julio Friedmann, destacó que "al depurador hemos sumado otras iniciativas para mejorar el desempeño medioambiental de la refinería Aconcagua, como una nueva unidad de tratamiento de azufre y una tercera planta de tratamiento de aguas ácidas. Cada uno de estos proyectos nos permitirá seguir cumpliendo un papel estratégico en la producción de combustibles que abastecen al país, especialmente a la zona centro sur de Chile, pero de manera más sustentable y beneficiando directamente a nuestras comunidades vecinas".
Durante 30 meses, ENAP trabajó para poner en funcionamiento este depurador, período que considera el proceso de adquisición, construcción y traslado de las partes del depurador -de 57 metros de altura- desde Europa a Chile, por vía marítima, y las obras en terreno para su implementación.