Continúan las reacciones tras el anuncio por parte de Codelco del cierre progresivo de la Fundición Ventanas, en Puchuncaví, en la Región de Valparaíso, lo que finalmente fue oficializado la última jornada por el Presidente Gabriel Boric.
"Como Gobierno apoyamos esta medida de Codelco, la contaminación en Concón, Quintero y Puchuncaví se arrastra por décadas; hemos visto cómo niñas, niños y adolescentes han enfermado en sus colegios, las intoxicaciones y el daño medioambiental son inaceptables", expresó la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas.
Mientras que el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, acotó que "estamos frente a un territorio donde teníamos que detener el funcionamiento de las escuelas para proteger la salud de los niños, eso no es posible permitirlo y, por lo tanto, el Presidente ha sido muy claro, el Gobierno tiene un compromiso con no tener zonas de sacrificio, pero también tiene un compromiso con los trabajadores".
"Es bien importante reiterarlo -continuó-: ninguno de los trabajadores que se desempeñaban en la Fundición Ventanas va a quedar sin fuente laboral".
OFICIALISMO Y OPOSICIÓN CON MIRADAS DISPARES
Desde el oficialismo valoraron la medida, y el diputado Diego Ibáñez (CS), integrante de la Comisión de Minería, aseguró que esta medida es "necesaria, es ética, es un compromiso ambiental de sentido común para que no paguen el costo las vidas de los niños y las niñas, y esto implica una modificación legal, estudios de impacto ambiental que van a demorar varios años y, como sabemos, esto no es culpa de los trabajadores".
"El Gobierno le está proponiendo un plan de transición laboral para que ninguna familia trabajadora pague el costo del cierre de la fundición o pague el costo de trabajar contaminados. Hoy, las empresas del Estado tienen que ser las más responsables con la gente y con el medio ambiente, y esto es una decisión que ningún gobierno se atrevió a tomar".
Mientras que el ex ministro y director del Centro de Acción Climática de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Marcelo Mena, dijo que "es necesario reemplazar esa fundición por otra en otro lugar, con mejores condiciones de ventilación; en el borde costero, esa contaminación fumiga a las comunidades y ha causado que cientos de personas hayan sido intoxicadas por una fuente que sabíamos que siempre era la misma, con reglas por más de 40 años hecha a la medida, con oposiciones documentadas por parte de Codelco a las normativas ambientales más exigentes".
Finalmente, el timonel RN Francisco Chahuán aseguró que "Codelco opta por la opción más facilista, en vez de invertir más en tecnologías limpias, en remediar el daño ambiental por años, cierra la empresa. Esa es, justamente, la opción que no resuelve el problema".
Haciendo un llamado a la empresa estatal a "compatibilizar las fuentes laborales de los trabajadores, el remediar el daño ambiental, y como uno de los actores relevantes en las acciones judiciales en contra de los que han dañado el medio ambiente en la zona".