Después de que transcurrieran nueve años de la desaparición de Pascale Alvarado, joven de 17 años, en la comuna de Puchuncaví, el Juzgado de Garantía de Quintero decretó prisión preventiva, el pasado viernes 6 de noviembre, a los dos presuntos responsables de la violación y asesinato de la adolescente gracias a la confesión de uno de los imputados, y la declaración de un testigo, hace tres años. Sin embargo, la polémica de este caso gira en torno al tiempo en que tardaron en determinar estas medidas contra los individuos, quienes quedaron en libertad en ese entonces, siendo que el abogado defensor de la familia afectada, Patricio Olivares, advirtió que ambos eran un peligro para la sociedad y debían quedar bajo resguardo policial. Por su parte, el fiscal adjunto de Quintero, Luis Ventura, explicó que dicha medida no fue aplicada en esa ocasión debido a que "no basta sólo con una confesión para ordenar una sentencia condenatoria".