Un millón 35 mil cajetillas de cigarros que eran transportadas en dos contenedores fueron decomisadas en el puerto de San Antonio, en la Región de Valparaíso.
Los productos se encontraban a bordo de una nave procedente de China y su destino era la Región Metropolitana. Según informó el Servicio de Aduanas, se trata del decomiso más grande del año, efectuado gracias a alertas internacionales y al trabajo de inteligencia: 518 mil cajetillas estaban declaradas como ropa de mujer.
Un seguimiento al mismo importador permitió ubicar un segundo cargamento de similares características, totalizando un avalúo de 4 millones 142 mil 810 dólares, equivalente a más de 3.200 millones de pesos chilenos.
El subsecretario de Hacienda, Francisco Moreno, comentó que "se trató de una incautación marítima; la mayor de los pasados 12 meses, que permitió la identificación de un contrabando de más de 1 millón de cajetillas y una evasión fiscal cercana a los cuatro millones de dólares".
El presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Manuel Melero, recordó que "ya vimos cómo se agudizó el fenómeno del comercio informal durante el estallido social, y ahora somos testigos que con la pandemia, este sistema de operar se volverá aún más crítico".