Un total de 23 funcionarios del Gobierno Regional del Biobío fueron notificados de su desvinculación en las primeras tres semanas de trabajo de la nueva administración tras el cambio de mando.
La salidas se notificaron en dos tandas, ya que inicialmente hubo 11 notificaciones a personas, pero finalmente cuatro trabajadores no siguieron.
En esa primera salida se indicó que "el 30 de junio de este año venció el plazo de los contratos de 11 trabajadores y trabajadoras a honorarios. Frente al vencimiento de sus contratos: dos de ellos se trasladaron a la Delegación Presidencial, cinco seguirán en sus funciones y cuatro no continuarán, por no existir disponibilidad presupuestaria, tras el análisis llevado a cabo por la nueva administración, asumida el 14 de julio del presente".
A eso se sumó que esta semana, acorde a cifras que maneja la Asociación de Funcionarios Profesionales del Gobierno Regional del Biobío, hubo 19 desvinculaciones.
Rodrigo Sandoval, jefe de la División de Presupuesto e Inversión expuso que "nos hemos encontrado con algunas situaciones de supuestas faltas a la probidad, con respecto a las cuales se están iniciando las acciones de investigación y sumariales que correspondan".
"Además nos hemos encontrado con algunos movimientos de última hora, en que funcionarios a honorarios fueron traspasados a contrata y que por tanto, obviamente obedecen al intento de amarrar a determinadas personas a una gestión regional, sin que eso tuviera una correspondencia con las funciones que estos debían tener", añadió.
Otra causal detallada por el funcionario es que hubo casos de trabajadores a quienes no se les pudo comprobar carga laboral.