Por unanimidad, el Consejo Regional del Biobío aprobó 4.000 millones de pesos para la compra de 200 taxis colectivos eléctricos para Concepción, Los Ángeles y Lebu, fondo que subsidiará hasta 16 millones para cada vehículo, quedando el copago como responsabilidad del empresario o conductor que lo adquiera; en un plan piloto conjunto con el Ministerio del Medio Ambiente.
"Esperamos tener una experiencia exitosa y luego escalarla, porque los gobiernos regionales recibimos una parte importante de nuestro presupuesto de la provisión FAR (Fondo de Apoyo Regional), que es el fondo espejo del Transantiago", comentó el gobernador Rodrigo Díaz.
La seremi de Energía, Daniela Espinoza, relevó que "va a permitir introducir la tecnología eléctrica en los vehículos de taxis y colectivos de las comunas del Gran Concepción, también es una señal importante de descentralización, y va a permitir ahorros importantes a los usuarios y dueños de taxis, porque estos vehículos son más eficientes y consumen menos energía".
Desde los taxis colectiveros del Biobío, el dirigente José Parra destacó que "ya hemos estado trabajando en este tema y creo que va a ser una gran noticia para nuestro gremio, ya que está pasando por una situación muy difícil por el precio de los combustibles y la situación económica", y vaticinó que "va a haber mucha gente que va a optar por este sistema de vehículos que va a revolucionar en la región, y creo que va a ser un modelo para el país".
"Una vez que los conductores vean los beneficios, va a ser un punto en que vamos a poder conversar de tarifas, y creo que va a ser más competitivo que en este momento", remarcó.
El proyecto va en línea con la estrategia regional de desarrollo que se propone llegar al 2050 con la carbono neutralidad como norma.
POLÍTICA DE DESARROLLO CON RESPETO A BIODIVERSIDAD
También el Consejo aprobó la primera política de desarrollo con respeto a la biodiversidad, lo que se traduce en un marco normativo sobre el cual los futuros proyectos con impacto en el medioambiente se deberán regir si quieren concretar su instalación.
Ana Araneda, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente del Core Biobío, explicó que "busca proteger, conservar, resguardar y hacer gobernanza sobre la biodiversidad entendiendo que tenemos una región con diversos procesos productivos con un deterioro en el patrimonio natural".
"Esta propuesta en conjunto con la Estrategia Regional de Desarrollo va a permitir poner, de alguna forma, límites a los proyectos que ingresen al Servicio de Evaluación Ambiental y también tener los planes a través de los recursos que se van a inyectar", cerró.
La implementación de la política se ha propuesto en tres períodos segmentados por cuatro años cada uno y siendo consecutivos desde su inicio en el año 2022.
Para su financiamiento, este se basará en los fondos sectoriales para implementación, se propone financiamiento regional por medio del Fondo de Desarrollo (FNDR) y proyectos internacionales que el mismo Ministerio del Medio Ambiente gestionará.
Óscar Reicher, seremi de Medio Ambiente del Biobío, expuso que, "sin duda, será un estándar a nivel nacional, permitiendo que la toma de decisiones del Gobierno Regional y la de los otros ministerios considere de manera significativa los objetivos que se están establecido en esta política".
El jefe de la División de Planificación y Desarrollo Regional del Gobierno Regional, Blas Araneda, indicó que "este instrumento nos da un marco de adaptación que logrará el crecimiento que necesitamos, generando trabajo y empleo, con respeto de nuestra riqueza natural para aprovecharla nosotros y las generaciones que vienen con un crecimiento con sostenibilidad que es parte de lo establecido en la actualidad".