La Fiscalía Regional del Biobío oficializó este martes lo que ya había adelantado en la víspera a Cooperativa: que el vehículo en el que fue asesinado hace una semana el joven Moisés Orellana Pavez, en Cañete, quedó abandonado, sin resguardo policial.
Este aspecto fue denunciado en los últimos días por la familia de la víctima, que hizo presente que los autores del crimen -que antes de éste cometieron un ataque incendiario y luego quemaron vehículos robados- tuvieron la oportunidad destruir evidencia relevante para el esclarecimiento del crimen.
"La Fiscalía del Biobío informa que inmediatamente después de tomar conocimiento de los incendios de inmuebles; de la muerte del joven Moisés Orellana Pavez; y la quema de dos vehículos, (...) instruyó a la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE), a la Brigada de Homicidios (BH) y el Laboratorio de Criminalística (LACRIM) de la PDI, para que concurrieran a realizar las pesquisas y peritajes respectivos. Asimismo, (...) se ordenó a Carabineros el resguardo de los sitios del suceso, mientras arribaban los especialistas de la PDI", señaló el Ministerio Público en un comunicado.
No obstante, "oportunamente la policía uniformada comunicó al fiscal a cargo que debido a que en ese momento no se disponía de una cantidad de funcionarios para atender de manera permanente y segura los, al menos, tres sectores de interés criminalístico y distantes entre sí (inmuebles incendiados, automóvil del joven fallecido y dos vehículos quemados), las respectivas custodias se realizarían de manera alternada. Lo anterior, considerando también que se debía prestar apoyo a las víctimas y testigos", detalló la Fiscalía.
Descarta alteración de la escena, pese a falta de resguardo
La institución agregó que "una vez que hubo luz de día, la PDI efectuó una completa
labor en los tres lugares ya descritos, más lo realizado en el Hospital de Cañete, donde fue llevada la víctima fatal. Se desarrollaron peritajes fotográficos, planimétricos y huellográficos, entre otros. Con todo el trabajo realizado, se obtuvieron importantes evidencias biológicas, materiales y balísticas, que son concordantes con la dinámica y la secuencia de la totalidad de los hechos que se están investigando".
"Por lo informado, se descarta que los sitios del suceso hayan sido alterados", cierra la nota de la Fiscalía.
Tras el crimen, en plena madrugada, un integrante de la familia se quedó solo cuidando el auto, para intentar que no fuera también destruido, como hicieron los asesinos con otros dos vehículos robados.
Además de ratificar la veracidad de lo acusado por la familia, la versión de Carabineros -transmitida por el Ministerio Público- confirma también el reclamo del alcalde Jorge Radonich: la insuficiente dotación policial en una comuna donde los hechos de violencia han aumentado en número y gravedad.
Radonich lanzó hoy "un grito de auxilio para que llegue más contingente, pero contingente preparado y con los medios necesarios para auxiliar en los casos".
"Hubo errores desde el comienzo"
La confirmación fue comentada por Sergio Vidal Pavez, primo de Moisés Orellana y vocero de la familia en estos momentos.
"Desde un inicio dijimos que nos parecía muy extraño que ocurriera una situación así, cuando se supone que un lugar donde hay un delito es un área 'sagrada', para el tema de los peritajes. Era muy raro para toda mi familia -aún cuando nosotros no sabemos mucho de esto- que no se cercara el área, no se tomaran pruebas de manera inmediata, no se pusiera más atención en eso", dijo Vidal a Cooperativa Regiones.
"Para nosotros era muy extraño y preocupante, porque aquí hubo ciertos errores que ocurrieron desde el inicio de la investigación", añadió el familiar, que el fin de semana ofreció en televisión un dramático relato de lo sucedido.
Más allá de esta nueva información, "nosotros lo único que necesitamos es que se encuentre luego a los responsables", añadió el joven.