Esta última semana de paro en el Hospital Regional de Concepción, el recinto que más operaciones realiza a nivel nacional, está colapsando a los pocos pabellones que se mantienen activos, de acuerdo con el Colegio Médico.
A la fecha, 135 cirugías programadas no se han podido realizar, y al menos seis de las que han quedado fuera han sido compradas al extrasistema, es decir, a clínicas privadas.
La tarde de este miércoles, el director subrogante del hospital, Boris Oportus, confirmó que tres de sus 11 pabellones están operando urgencias, y en la última semana, se han desarrollado 114 de esas intervenciones.
Sobre las tratativas con los gremios, el directivo detalló que "les hemos entregado varias propuestas, acotadas al marco legal, y hasta ahora seguimos en conversaciones buscando una solución que permita lo más pronto la normalización de nuestros pabellones y retomar las prestaciones para los usuarios, que son los principales afectados y nuestra primera prioridad".
Aquello, dijo Oportus, en un contexto donde "entendemos el desgaste laboral de nuestro equipo de salud, producto de un alto ausentismo".
La paralización está motivada por la sobrecarga laboral a raíz del ausentismo, inicialmente producto de una alta tasa de casos de Covid-19, pero que en la actualidad responde a la gran cantidad de licencias psiquiátricas presentadas por el personal.
Los trabajadores pidieron un bono de 400 mil pesos, el que fue negado por la administración dado que no es factible conseguir esos montos estando el presupuesto en ejecución, y como la contrapropuesta eventualmente fue rechazada, la protesta continúa.
"No podemos estar de acuerdo con que una forma de protestar sea dejar de atender a enfermos que podrían complicarse, o incluso morir por estas postergaciones", fustigó Germán Acuña, presidente del Colegio Médico de Concepción. No obstante, "entendemos que el personal está agotado, con una cantidad de funcionarios enfermos, que son del orden del 50 por ciento o más".
Por ello, "reconocemos los esfuerzos del personal, de las jefaturas de servicio, de la dirección del hospital y del servicio" para mantener el activo el recinto.
"Sin embargo, llamamos a que la ministra de Salud (María Begoña Yarza), que ha demostrado ser tan poco empática con sus médicos y su personal, sea por lo menos empática con los enfermos, y haga un plan de recuperación de emergencia para que no se sigan postergando", emplazó el líder del gremio.
El hospital ha debido salir al extrasistema, es decir, comprar prestaciones al servicio privado.