El presunto abuso sexual ocurrió el año 2002 y afectó a un menor de 14 años.
Fernando Chomalí, arzobispo de Concepción deberá determinar la verosimilitud (en términos canónicos) del caso.
La investigación tardó tres meses.
Con "indicios de verosimilitud" finalizó la investigación canónica realizada por el arzobispado de Concepción respecto al sacerdote Hernán Enríquez, por el presunto abuso sexual reiterado que habría cometido contra un menor de 14 años durante el año 2002, cuando era director del Seminario Menor de Concepción.
La indagatoria estuvo a cargo de el sacerdote Carlos Hernández, vicario judicial del obispado de Temuco, quien ya remitió los antecedentes a la Cancillería del Arzobispado de la Santísima Concepción para que sean analizados por el arzobispo Fernando Chomalí.
"Mi representado no ha sido notificado, por lo menos por escrito de algún medio formal, de esta conclusión de investigación. Nosotros no tenemos ningún antecedente de esta indagatoria", señaló el abogado del sacerdote, Raúl Bustos.
"Ahora tenemos una investigación previa que da verosimilitud -no se a que- y me imagino que si se establece que hay verosimilitud habrá alguna declaración por fin de la víctima. Si es así, esperamos que esta declaración se ajuste a lo que se ha dicho hasta el momento", agregó el jurista.
"Creemos que es un avance"
En tanto el vocero de la Red de Laicos en Concepción, Pablo Durán, aseguró que esto permite restarurar la versión de la víctima, ya que "muchas veces" se puso en duda su versión.
"Se había intentado crear un manto de que esto era mentira, de que no había probabilidades de esto, desmentir lo que se estaba diciendo", señaló Durán.
"Estos indicios de verosimilutd, nosotros creemos que es una avance y lo que si esperamos es que se actúe con mucha premura y que no se deje pasar el tiempo", agregó el vocero.
Dentro de los próximos días Chomalí deberá entregar un voto de recomendación para luego determinar la verosimilitud del caso (en términos canónicos) que se dio a conocer durante el mes de julio
El documento redactado por el sacerdote temuquense incluye entrevistas a Hernán Enríquez, testigos de la época, el papá del menor y también al presunto abusado.
