El niño, hijo de la pareja del formalizado, falleció producto de una golpiza atribuible a terceros.
La decisión se basó al no haber elementos fundados sobre la participación del hombre.
La investigación sigue abierta y tiene un plazo de seis meses para acabar diligencias.
La Corte de Apelaciones ratificó mantener en libertad, y sin medidas cautelares, a un joven de 23 años, quien fue formalizado por el homicidio de un bebé de un año y 11 meses el pasado 30 de noviembre en Paullihue, en la comuna de Los Ángeles.
El imputado, identificado con las iniciales M.F.V., es pareja de la madre del niño, a quien se le acusó de dar una golpiza a la víctima, provocándole la muerte.
El defensor penal público Cristian Vigueras planteó que "los antecedentes que se han reunido hasta ahora no permiten establecer que haya sido el imputado quien ejecutó las acciones que condujeron a la muerte de este menor".
Agregó que "el menor se encontraba en un domicilio en que, efectivamente, interactuaba por lo menos con tres personas incluida la madre. De manera que nosotros tenemos una duda bien fundada en relación a atribuirle al imputado conductas que lo hayan llevado a la muerte".
Juan Carlos Vargas, fiscal adjunto de Los Ángeles, en la Región del Biobío, apuntó que "en esta etapa procesal nosotros estamos convencidos de que el autor es a quien formalizamos, pero a priori tampoco se puede descartar la participación o mayor información recabadas de otras fuentes".
En esa línea, el fiscal remarcó que "las lesiones no son compatibles con caídas accidentales de la magnitud que se relatan por los testigos".
La investigación sigue abierta y hay un plazo de seis meses para acabar las diligencias y ver quien efectivamente golpeó al bebé fallecido.
