La consejera regional por el Biobío Javiera Vargas salió en su defensa tras la denuncia que recibió por un presunto "ritual de magia" que no ha pagado: descartó que esta situación involucre "la asignación indebida de recursos públicos" y denunció "hostigamiento, acciones extorsivas y difamación".
Esta situación fue denunciada la semana pasada por la organización Bosque Adentro, que se denominan como "maestros y brujos ancestrales", quienes acusan que ayudaron a Vargas en las elecciones a las que se presentó como independiente con cupo de Ecologista Verde, sin recibir el pago que les ofreció. Es más, dicen que obtuvo el puesto gracias al ritual y, por lo mismo, denuncian un "fraude electoral".
Ante esta acusación, la aludida entregó este jueves una declaración pública, en la que reconoce "el error de haber tomado contacto con ciertas personas que ofrecían terapias alternativas, sin haber identificado tempranamente señales negativas de una agrupación que ocultaba sus motivaciones reales para prestar sus servicios".
En esta línea, Vargas explicó que en su rol de autoridad y de "acercar las instancias de participación a la ciudadanía y asociaciones interesadas en el desarrollo del territorio", es que entregó a esta agrupación "orientaciones y guía sobre los procedimientos regulares para su diseño organizacional en el marco de postulación a fondos públicos participativos, pensados para proyectos de interés social".
La ayuda que entregó, según su criterio, fue actuando de buena fe y sin "involucrar la asignación indebida de recursos públicos, pues la probidad es una regla necesaria y que no puede admitir excepción en el comportamiento de las y los representantes populares. Cabe decir que el ejercicio de mi cargo actual, compromiso público que he tomado con seriedad y rigor, se debe a la voluntad popular y el proceso democrático".
DENUNCIA POR EXTORSIÓN
Debido a esta denuncia, que se viralizó en los últimos días por redes sociales, Vargas acusó ser víctima de "hostigamiento y extorsión", al igual que familiares, amigos y cercanos, quienes "han sido acosados por redes sociales y expuesta su vida privada con el fin de que yo pague un monto no pactado".
"He llegado al punto de recibir amenazas a mi integridad física y psicológica, situación que ha expuesto mi seguridad, como también la de mis cercanos", lamentó la consejera regional.
Para aclarar esta situación, Vargas detalló que "fueron enviadas todas las evidencias (conversaciones, audios, etc) existentes en mi teléfono celular a la PDI para ser revisadas, lo que culminó con una denuncia categorizada por extorsión que fue ingresada como causa en el Ministerio Público de Justicia, además se expondrá en la Comisión de Ética del Consejo Regional las temáticas relacionadas con mi rol de consejera en la cual estoy siendo juzgada, en donde pondré mi total disposición pues situaciones como estas no pueden ser permitidas y merecen ser aclaradas".
Finalmente, en este comunicado agradeció el apoyo que ha recibido y señaló que "con las mismas fuerzas que asumí, seguiré trabajando por nuestro territorio y sus habitantes en la búsqueda de una vida regional plena".
