El intendente de la Región del Biobío, Sergio Giacaman, reconoció una falla total en la estrategia de prevención del delito en la provincia de Arauco, escenario de tensión que ha ido al alza durante los últimos meses.
La última ola de violencia registró 5 ataques en menos de 24 horas en el Cono Sur del Biobío donde hubo registros de destrucción de vehículos policiales, particulares e infraestructura.
"Hemos visto una seguidilla de atentados que generan mucho daño en las personas. Tenemos que fortalecer nuestra estrategia. Quiero ser autocrítico: si vemos que esto ocurre tenemos que ver la forma de robustecerlo (la estrategia)", declaró el intendente.
Uno de los hechos más impactantes fue el ataque incendiario a la Escuela-Internado Pedro Etchepare de Cañete.
Sobre este hecho, el alcalde de la comuna, Jorge Radonich, puntualizó que "era una escuela-internado que alberga a 15 alumnos de escasos recursos, teníamos concentrados computadores, la alimentación, las cajas de alimentos que le íbamos a entregar(...) No se pudo salvar nada, se quemó completamente".
Por su parte, Patricia Carreño, profesora encargada del establecimiento, dijo que lo ocurrido la noche del miércoles, afectó a niños vulnerables de la zona.
"Es fuerte y muy duro las condiciones en la que quedó el establecimiento. Eran 15 alumnos y cinco profesores, los alumnos son niños del sector que en el fondo son vulnerables", lamentó.
A fines de junio el Gobierno aseguró que la zona de Arauco y Malleco sería reforzada con militares. Sin embargo, días después el Ejército descartó aquello, aclarando que por ahora solo hay despliegue policial con apoyo de la Armada.