Desde el pasado sábado que encapuchados mantienen tomado el fundo San Miguel, en Ralco, Alto Biobío. Se trata de 120 hectáreas a las que llegaron en grupo y donde amenazaron a su dueño, Otto Wild, diciéndole que tenía tres semanas para sacar su cosas e irse. "Salen por las buenas o salen por las malas", le dijeron al adulto mayor que vive ahí, junto a su familia, desde hace 45 años. "Nos dieron un plazo de tres semanas para sacar todo, porque quieren tomar el fundo que desde hace 140 años está en manos de chilenos y que nunca fue de alguna comunidad indígena", aseguró Wild. "Es motivo de alta preocupación", reconoció el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien dijo que el caso ya está en manos de la Fiscalía, en tanto que las autoridades de Gobierno han estado en el lugar, tomado contacto tanto con la familia y "abierto puertas de diálogo" con los comuneros de la toma. La delegada presidencial en la Región del Biobío, Daniela Dresdner, comentó que "esto no es algo que esté en las manos del Gobierno, porque es algo que está en la Fiscalía. En ese sentido decir que este es un poder totalmente distinto al poder Ejecutivo, por lo tanto nosotros ahí no tenemos ninguna incidencia". "La familia ha estado protegida durante todo el tiempo, Carabineros hace rondas constantes en la casa, la familia tiene incluso un aparato de comunicación directa con Carabineros en caso de cualquier cosa. Y eso ha estado presente desde el primer día que se hizo esta recuperación. Entonces quiero decir que no hay una dejación de la seguridad de la familia, pero las medidas que hay que tomar están en manos de la Fiscalía", agregó la autoridad.