La Seremi de Salud del Biobío aprobó un protocolo para el uso de químicos disuasivos en manifestaciones violentas por parte de Carabineros de Concepción, a quienes a inicios de diciembre se les ordenó suspender el uso de estas sustancias tras un recurso de amparo interpuesto por el Instituto de Derechos Humanos en el Biobío.
Lo anterior ocurrió a raíz de la denuncia de dos jóvenes que acusaron haber sido quemados tras recibir un chorro del carro lanzaguas que contenía una mezcla con un gas de nombre CS.
El jefe del Departamento Jurídico de la Seremi de Salud, Franco Olivarí, señaló que "se determinó que la sustancia química CS, utilizada para el control del orden público, no produce efecto nocivo en la salud de las personas cuando son utilizados en forma esporádica y por un corto lapso de tiempo".
"Este Departamento Jurídico, con el objeto de velar por el respeto y el resguardo del derecho de la salud de las personas, formuló una serie de observaciones al protocolo, por ejemplo, la prohibición de la utilización de estas sustancias químicas en lugares cerrados, así como la rotación de los miembros del cuerpo de Carabineros que utilizan dichas sustancias, como también la información por la vía más expedita de cualquier modificación o alteración del protocolo", agregó Olivarí.
El acto administrativo de respuesta positiva aún debe ser analizado por la Corte Suprema para emitir una resolución que permita a Carabineros volver a utilizar tanto el agua con mezcla como los gases lacrimógenos.