Siete nuevos despidos se realizaron en el gobierno regional de la Región del Biobío, hecho que generó molestia al interior de la Asociación de Funcionarios Fiscales que acusan "favores políticos" de la nueva administración.
Desde marzo se han despedido cerca de 30 funcionarios desde el Gobierno Regional, que ha llenado de incertidumbre a los trabajadores de esa organización, según los dirigentes.
"Hay un clima horrible al interior del Gobierno Regional, la incertidumbre de seguir trabajando o no, que te despidan, que no vas a seguir trabajando, eso genera un clima muy delicado (...) las personas que se van no se van con un finiquito, no se van con vacaciones proporcionadas, mes de aviso, nada", indicó el presidente de la Asociación de Funcionarios del GORE, Christian Klennet.
Además, aseguran que el intendente del Biobío, Jorge Ulloa, no cumplió con las promesas, quien les aseguró que solo sacaría a operadores políticos del gobierno anterior.
El diputado por el distrito 20, Gastón Saavedra, explicó que "la derecha lo ha tomado como un botín para repartirse vilmente cargos y cupos para satisfacer las demandas de los dirigentes".
El martes los dirigentes de los funcionarios del gobierno regional, junto a la Anef, evaluarán una posible paralización y una reunión con el intendente Ulloa para terminar con los despidos.