A primera hora de este lunes, el comité técnico conformado por los vecinos de la localidad de Llico, en la comuna de Vichuquén, se pronunciará sobre los próximos pasos tendientes buscar soluciones al hecho de que están consumiendo agua salada.
Esto después que el terremoto y posterior tsunami del 27 de febrero de 2010 fracturara la principal napa que abastecía de agua dulce a ese pueblo, donde hay unas 1.500 personas afectadas. Para el comité, los plazos están más que cumplidos, por lo cual preparan una manifestación en el frontis del Palacio de La Moneda.
El alcalde de Vichuquén, Román Pavez, prevé que la emergencia aumente por el hecho de que se sigue edificando en sectores afectados.
"Estamos construyendo poblaciones de gente terremoteada y hoy en Lipimávida esas viviendas no tienen agua, lo mismo que en Boyeuca y en la localidad de Llico tenemos un agua que no es apta para el consumo humano", explicó.
Hasta la localidad de Llico concurrió el propio intendente del Maule, Rodrigo Galilea, quien conversó con algunos de los vecinos y con el personal de la Dirección de Obras Hidráulicas para interiorizarse de lo que está pasando. Aseguró que las soluciones se han venido dando, pero que no se han comunicado.
"Se están terminando y hoy, de hecho, se está realizando el afuero definitivo de una inversión de muchos millones de pesos para nuevos pozos para la localidad, y asegurarnos el agua dulce. Además de eso, se inició el estudio de cuatro nuevos pozos en los sectores aledaños, algunos al lago Vichuquén, otro en la laguna Torca y otro más en el estero hacia el sector marítimo", comentó.
Añadió que "estamos, además, instalando dos nuevos estanques de agua para aumentar la capacidad, desde 75 cubos de agua a 150 cubos de agua, para asegurar en la noche la acumulación de agua que permita al día siguiente tener tranquilidad".
Agua no potable
Sin embargo, existe un decreto emanado desde la autoridad sanitaria del Maule, donde se revela que el agua para el consumo humano en la localidad de Llico posee un alto contenido en sodio. Eso es lo que beben sus habitantes, según dijo el director comunal de salud de Vichuquén, Omar Gutiérrez.
"Desde marzo hay un decreto de la autoridad sanitaria, del seremi de Salud de la Región del Maule, que establece, por la cantidad de sodio que tiene el agua, que no es potable. No es apta para el consumo humano. Afecta notablemente a la salud de la población pero, en particular en el sector salud, tenemos un problema con la higiene de la instrumentación y de los profesionales al momento de hacer sus intervenciones", detalló.
