Seis de los nueve guardias de la concesionaria renunciaron tras el ataque con arma blanca a raíz de que uno de ellos.
Se cursaron multas a empresa privada de seguridad.
El terminal y sus alrededores son considerados focos de delincuencia de la ciudad.
La Gobernación del Maule, Carabineros y la Dirección del trabajo llegaron hasta el terminal de buses de Talca Lorenzo Varoli, para fiscalizar en terreno las condiciones en las que opera el servicio privado de guardias que se vio afectado por el ataque con arma blanca a uno de los funcionarios, lo que ocasionó la renuncia de seis vigilantes.
Por ende, la visita en terreno de las autoridades tuvo por objetivo verificar si la empresa cuenta con el contigente suficiente para el servicio de vigilancia.
Felipe Donoso, gobernador de Talca, manifestó que "la población y los usuarios pueden estar tranquilos porque el terminal de buses cuenta con personal suficiente para la vigilancia".
"Carabineros realiza rondas permanentes en los alrededores y está coordinado con los guardias para enfrentar cualquier acto delictivo lo que nos ha permitido bajar la recurrencia de delitos en el propio recinto y en el barrio talquino", agregó.
En la ocasión, la fiscalización de Carabineros y la Dirección del Trabajo arrojó una infracción al reglamento de funcionamiento de los guardias, específicamente falta de uniformes, y además se detectó irregularidades en el libro de asistencia por lo cual la empresa administradora fue citada a la Inspección del trabajo el próximo 16 de octubre.
