Detectives de la Brigada Investigadora de Robos de la PDI detuvieron a dos jóvenes que, operando como "motochorros", asaltaron a un trabajador de una automotora en noviembre del año pasado en la ciudad de Curicó.
"Este delito lo cometieron en el mes de noviembre contra un trabajador de la empresa Rosselot; quien, cuando realizaba depósitos de dinero, estacionó su camioneta y fue amenazado con una aparente arma de fuego, obligándolo a entregar un millón de pesos que portaba", explicó el fiscal Rodrigo Pizarro.
"Estas personas habían hecho un estudio previo de sus actividades. Ellos se movilizaban en una moto, con la cual lo siguieron y finalmente asaltaron a la persona", indicó el persecutor.
NÓVELES EN EL CRIMEN
Los detenidos tienen 18 y 19 años, no presentan antecedentes penales y confesaron su participación en el crimen, de modo que la Fiscalía duda de la conveniencia de enviarlos a la cárcel.
En miras a la audiencia de formalización de cargos, "se van a evaluar las medidas cautelares, porque además de que tienen irreprochable conducta anterior, ambos colaboraron sustancialmente con el esclarecimiento de los hechos: prestaron declaración reconociendo su participación el hecho y eso, obviamente, hay que tomarlo en consideración al momento de determinar qué medida cautelar vamos a solicitar", señaló el fiscal.
En estas circunstancias, profundizó Pizarro, "ingresarlos al complejo penitenciario puede ser más perjudicial, en realidad... (No obstante) vamos a pedir una cautelar que sea bastante intensa en atención a que el delito que tiene una pena bastante alta", finalizó.