La PDI comenzó las indagaciones para determinar la eventual intencionalidad o intervención de personas en los incendios forestales en los sectores de Santa Cruz y Curimaqui de Cauquenes, provincia de la Región del Maule que se mantuvo con alerta roja desde el martes, a raíz de las emergencias que han consumido alrededor de 1.500 hectáreas y dos viviendas.
En un balance de la delegación presidencial provincial de este miércoles se actualizó el estado de ambas emergencias, donde mantienen cortafuegos para iniciar con la fase de contención, que permitirá el trabajo de los detectives para establecer el origen del fuego.
La alerta roja fue cancelada y, en su lugar, se declaró alerta amarilla. "Pero las condiciones climáticas son muy desfavorables", puntualizó el director regional de la Conaf, Luis Carrasco.
El subprefecto de la PDI de Cauquenes, Fernando Uribe, señaló que los detectives "están haciendo un trabajo investigativo, apoyados por peritos del Laboratorio de Criminalística y sus pares de Talca, realizando diversas pericias para esclarecer las causas de estos incendios y, posteriormente, entregar los informes al Ministerio Público para la investigación".
El delegado provincial Francisco Ruiz comentó que "el despliegue humano y de recursos que hemos tenido ha atacado con todos los incendios", en tanto que "actualmente, más de 30 profesionales de la PDI trabajan en la zona realizando los peritajes pertinentes para determinar las causas de estos", detalló Ruiz.
Según la autoridad regional, este jueves "bajaron un poco los recursos" a raíz de un nuevo foco de fuego que ha consumido 80 hectáreas de bosque en la localidad de Caliboro en San Javier, dos helicópteros utilizados en Cauquenes fueron trasladados hasta el lugar para combatir la nueva emergencia.