Diversas organizaciones socioambientales de la Patagonia del sur de Chile acusan que existe una treintena de salmoneras operando al interior de parques nacionales al margen de la ley.
Según las denunciantes, que forman parte de la campaña de Áreas Protegidas Sin Salmoneras, se trata de 19 concesiones al interior del Parque Nacional Alberto de Agostini (Magallanes), cuatro en la Laguna San Rafael y cuatro en las aguas del Parque Nacional Isla Magdalena (Aysén).
"Es impactante e inconcebible que una industria que es intensiva en el uso de antimicrobianos, pesticidas y que genera severos impactos en el medioambiente nativo, incluso generando condiciones de pérdidas, parcial y total de oxígeno en los fondos marinos como la industria salmonera, siga operando en las aguas de los Parques Nacionales", denunció Álvaro Montaña, de la Agrupación Defendamos Chiloé.
"Los parques son de la mayor protección de nuestra legislación ambiental en Chile y que tres parques nacionales tengan 27 concesiones de salmones es una vergüenza nacional y mundial", criticó.
Por su parte, Liesbeth van der Meer, directora ejecutiva de la ONG Oceana Chile, señaló que "tanto Contraloría como el Tratado de la Convención de Washington, del cual Chile es firmante, prohíben la salmonicultura en zonas aledañas a Parques Nacionales, entonces ¿cómo explicamos las presencia de jaulas en 3 Parques Nacionales?".
"Es difícil entender por qué una actividad económica puede estar por sobre los dictámenes y los tratados internacionales sin que el Estado pueda hacer algo para evitarlo", reprochó la activista.
Mientras que Alejandro Núñez, presidente de la Fundación Ciudadanos y Clima, complementó que esta situación "está fuera de toda lógica: los parques son mandatados para la protección y estos temas sucedieron cuando ya estaba instalada la industria. Se supone que hay un plan de transición justa donde debieran comenzar a salir de esos lugares".
"Aquí hay prioridades que tienen que ver con pueblos originarios, que de alguna manera transitaban desde antes que fueran declarados en situación de parques u otros", agregó Núñez, quien también acusó que "estas actividades de la industria salmonicultura, con especies introducidas y metodologías de trabajo muchas veces fuera de la praxis de la ética y la moral, me parece que no está bien".
Las organizaciones harán llegar su denuncia formal a la Contraloría, la Conaf, la Subsecretaría de Pesca y la Superintendencia de Medio Ambiente en los próximos días.
