Ocho empresas foseras que operan entre las regiones de O'Higgins y Biobío presentaron una denuncia contra Essbio por "abuso monopólico" en el mercado del tratamiento de aguas servidas.
La denuncia fue formalizada ante la Fiscalía Nacional Económica (FNE) luego de que Essbio resolviera modificar los contratos con las firmas de limpia fosas, pasando de cobros por cargo fijo mensual a un nuevo modelo según volúmenes de descarga.
"El cambio tarifario se traducirá en alzas de hasta 300 por ciento, que lo más seguro es que terminen siendo traspasadas a los clientes, que tan solo en Ñuble alcanzan 150 mil personas", señaló Miguel Ángel Silva, vocero de las pymes denunciantes.
Las compañías que se sumaron a la denuncia son Comercial Serpa, Don Benjamín y P&R Servicios Chaparro, de la Región de Ñuble; Bio Sur, Fosamar y Fosas Biobío, de la Región del Biobío; Amaco, que opera entre O'Higgins y Ñuble; y JCV y Herrera que tiene servicios entre Maule y O'Higgins.
El abogado patrocinante, Moisés Vergara, señaló que la denuncia fue acogida, dando paso a una investigación cuyos resultados deberían sentar las bases para una acusación ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia, la instancia que, en definitiva, deberá pronunciarse y, eventualmente, establecer un modelo tarifario definitivo.
"Mayor costo operacional"
Desde la empresa Essbio explicaron a través de un comunicado que el nuevo modelo de cobro considera parámetros técnicos para volúmenes de descarga y concentración de materia orgánica, lo que ayuda a controlar el impacto medioambiental.
"Desde el año 2010, se han incrementado en un 158% las descargas de limpia fosas a nuestras plantas de tratamiento de aguas servidas, generando un mayor costo operacional", sostuvo la sanitaria.
(Comunicado Empresa Essbio)
