Una fuente oficial trasandina afirmó al diario La Nación de Buenos Aires que se hará "obligatoria la medida" de aplicar impuesto a los compradores foráneos de bencina.
El Gobierno de Argentina determinó que su anunciada idea de elevar el precio de los combustibles para vehículos extranjeros en zonas fronterizas será obligatoria para los dueños de estaciones de servicio, según anunció un funcionario de Gobierno al diario La Nación de Buenos Aires.
"Vamos a hacer obligatoria la medida para que no haya problemas. La resolución se va a conocer en los próximos días", la fuente, del Ministerio de Planificación Federal.
Así, la Casa Rosada responde a la negativa que empresarios independientes a acatar el régimen anunciado por el secretario de Energía, Daniel Cameron, y que busca detener "la fuga" de bencinas y petróleo en las zonas fronterizas, por el menor precio de los combustibles en Argentina, donde están congelados los precios de los hidrocarburos.
"Había cierta confusión y por eso decidimos hacerla obligatoria", aclaró el funcionario federal al medio, y agregó que "estamos intentando llegar a un precio del combustible para después calcular el valor de la base imponible".
La fuente, que se mantuvo en el anonimato, detalló que "de cualquier manera el precio va a ser algo inferior al que se cobra en los terceros países".
Así, las estaciones de servicio deberán tener al menos un surtidor adicional, exclusivo para los vehículos extranjeros -principalmente brasileños y chilenos- que deseen comprar combustibles.
"Hasta la primera semana de agosto, cuando entre en vigor la medida, las petroleras deberán presentar al Gobierno un detalle de los precios a los que comercializarán el combustible a las estaciones de servicio. Según confió la fuente oficial, las petroleras dispondrán de dos precios de venta a los estacioneros: uno destinado al mercado interno y otro para los vehículos extranjeros", reseñó La Nación.
La idea de la administración de Néstor Kirchner es resistida en zonas turísticas, como la Provincia de Mendoza, que el jueves 13 de julio pidió a Buenos Aires ser excluida de la medida.
La ministra de Turismo y Cultura local, Mariana Juri, explicó a autoridades federales que la situación de Mendoza es "distinta de la que se registra en el noreste argentino".
"Por eso se ha pedido que se exceptúe la aplicación de la medida a las estaciones de servicio que están a más de 50 kilómetros de la frontera", agregó.
El medio bonaerense adelantó también que "ante una posible caída del turismo chileno en Mendoza, el gobierno provincial realizará gestiones en el país vecino para explicar los alcances de la medida y calmar los ánimos de políticos y empresarios disconformes con la resolución". (Cooperativa.cl)
