El canciller Heraldo Muñoz recalcó en El Diario de Cooperativa que Chile está "muy bien preparado" para enfrentar los alegatos orales en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya por la demanda marítima de Bolivia, aunque no descartó que el Presidente electo Sebastián Piñera realice cambios en el equipo chileno.
La programación de La Haya coincidirá con los primeros días de Gobierno del Presidente electo, quien asumirá el poder el próximo 11 de marzo, ante lo que el jefe de la diplomacia nacional aseveró que "no nos complica".
El titular de Relaciones Exteriores explicó que "los argumentos que tiene Chile son argumentos que se han mantenido estables durante años, es una postura de Estado que trasciende a uno u otro Gobierno y, en ese sentido, estamos muy tranquilos y nos vamos a coordinar con el Gobierno entrante en función del interés nacional".
"Pero el Presidente entrante tiene todo el derecho a modificar la constitución del equipo. Eso, por cierto, él lo tendrá que considerar", reconoció.
Muñoz ha tenido dos reuniones que ha tenido con Piñera y, según el canciller, "las señales que tengo es de continuidad, pero él tiene el derecho a hacer cambios si él estima necesario o agregar juristas a un equipo que, en todo caso, está muy consolidad y es de altísimo nivel. Estamos muy tranquilos en ese sentido".
Pese a ello, resaltó que "estamos muy bien preparados para enfrentar estos alegatos orales (...) Por supuesto, trasciende dos Gobiernos, pero las posturas de esto son de Estado y no van a cambiar".
"El papa conoce nuestra posición"
En tanto, respecto a la visita del papa Francisco a Chile que concluye este martes en Iquique, el canciller Muñoz destacó que ha sido "tranquila" y "sin sobresaltos", aunque "se ha visto, quizás, perturbada por la situación del obispo (de Osorno, Juan) Barros", sindicado como encubridor de abusos sexuales de Fernando Karadima y criticado por ser parte de la comitiva papal.
El pontífice, hasta el momento, no ha realizado declaraciones respecto a la demanda boliviana en La Haya, respecto a lo cual el ministro de Relaciones Exteriores dijo que "él no ha hablado de este tema porque conoce nuestra posición".
"En definitiva, quien juzga este asunto es la Corte Internacional de Justicia. Así que creo que ha habido respeto mutuo con este papa", sentenció.