Relaciones Exteriores respondió a los alegatos del mandatario boliviano, Evo Morales, por eventual presencia militar chilena en la frontera.
Desde la institución aseguraron que el vecino país busca "desviar la atención de sus problemas internos".
Chile respondió que la declaración de Bolivia es "totalmente infundada".
El ministerio de Relaciones Exteriores desestimó las acusaciones del presidente de Bolivia, Evo Morales tras señalar que Chile instaló una base militar en la zona fronteriza colindante con el Río Silala, cuyas aguas son objeto de disputa entre ambos países.
A través de un comunicado, la Cancillería sostuvo que "es totalmente infundada la acusación del presidente boliviano de que Chile habría instalado una base militar 'ilegal' a menos de 15 kms de la frontera con ese país, en la zona del Río Silala".
"No existe tal supuesta instalación militar. Lo que ha habido es una intensificación del patrullaje militar en territorio chileno para impedir los ataques contra civiles, robos, contrabando y narcotráfico provenientes de Bolivia, lo cual ha tenido el efecto de disminuir notoriamente esos actos delictivos", detalló el documento.
Según señala la Cancillería en el comunicado, el gobierno de Bolivia "nuevamente busca desviar la atención de sus problemas internos con alegaciones falsas en contra de Chile".
Desde la Cancillería explican que "la única instalación militar en la zona del Río Silala se encuentra en el lado boliviano", con apenas a 1,5 kms en línea recta de la frontera con Chile, y que por tanto, "Bolivia debiera responder por esa presencia militar permanente en la frontera".
En tanto, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Jorge Pizarro, también le respondió a Morales.
"Son (declaraciones) maliciosamente armadas para generar la imagen de que Chile es un país belicoso, y yo le diría al Presidente Morales que se preocupe de sus cosas internas, porque tiene bastantes problemas allá y que no use al río Silala ni la demanda de La Haya para seguir argumentando en su favor en términos de la política interna boliviana", afirmó.
