El agente chileno ante La Haya dijo que "no hay que caer en una psicosis colectiva".
Planteó que el endurecimiento del discurso de Evo Morales "siempre" surge cuando tiene problemas políticos internos.
José Miguel Insulza descartó que "los temas pendientes" con Bolivia puedan provocar un giro en la política exterior de Chile.
El agente chileno ante la Corte de La Haya por la demanda marítima boliviana, José Miguel Insulza, llamó a "no asustarse tanto" frente al anuncio de Evo Morales de que presentará una nueva demanda contra nuestro país por el uso de las aguas del Río Silala.
"Si la demanda se presenta y la Corte Internacional de Justicia (CIJ) la admite nosotros nos defenderemos como corresponde. No hay que asustarse tanto", señaló Insulza en declaraciones a TVN.
"No estamos urgidos de huir hacia ninguna parte. Estoy seguro que se nos dará la razón", agregó el ex secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Frente a la solicitud de varios políticos de retirarse de Pacto de Bogotá, tratado que da competencia a la CIJ para resolver conflictos que surjan entre las naciones que se adhieran al convenio, Insulza dijo que "no hay que caer en esta especie de psicosis colectiva que nos puede llevar a hacer cosas en el plano internacional que nos arrepentiríamos de hacer y que probablemente es lo que busca el gobierno de Evo Morales".
Agregó que aunque Chile tiene alguno que otro tema pendiente con sus vecinos, éstos "no son de la gravedad para provocar un giro en nuestra política exterior".
El agente ante La Haya aseveró que siempre estos casos surgen cuando hay problemas internos en la política boliviana y la idea "es crear una sensación que hay muchas cosas que andan mal en la relación entre Chile y Bolivia, cosa que es desmentida por el comercio que pasa todos los días, por la cantidad de bolivianos que viven en Chile y por la tranquilidad que reina en las fronteras".
Bolivia defiende que el Silala, situado en la región andina de Potosí, contiene manantiales cuyas aguas fluyen a Chile por canales artificiales construidos en 1908, por lo que exige compensaciones económicas al Gobierno y a empresarios de la zona.
En tanto, Chile sostiene que se trata de un río internacional. El canciller Heraldo Muñoz, mostró días atrás un mapa que acompañaba el tratado bilateral de 1904 firmado con Bolivia y en el que, según dijo el ministro, se define al Silala como un río internacional.
